La higiene es uno de los puntos más importantes a la hora de prevenir enfermedades en las aves. Es necesario hacer una limpieza periódica de la jaula, platos, perchas, juguetes y cualquier otro objeto que se encuentre dentro.
El piso de la jaula se recubre con un lienzo o papel donde se acumulan las deposiciones y restos de comida. Estos pueden ser descartables, como el papel periódico o los que se venden especialmente para este fin. Cualquiera sea el que uses, es importante que lo cambies a diario para eliminar una de las mayores fuentes de contaminación dentro de la jaula.
Los platos, juguetes, bañeras y demás accesorios donde los pájaros se posen y defequen deben lavarse todos los días con abundante agua caliente y jabón. También pueden lavarse en el lavavajillas después de quitar la suciedad gruesa. Luego aclara y seca bien cada utensilio antes de devolverlos a su sitio.
El resto de la jaula puede lavarse con menos frecuencia. Las aves grandes, como loros y loriquitos ensucian más y requieren un lavado semanal, mientras que otras más pequeñas solo necesitan este tratamiento cada dos a cuatro semanas, según el tamaño de la jaula y la cantidad de aves que vivan en ella.
Los elementos que necesitas para la higiene son paños de papel absorbente, una esponja abrasiva para desprender el material seco y adherido, una cubeta de plástico con agua caliente, un cepillo para acceder a las partes más difíciles, un cepillo para botellas de agua o tubos. Es conveniente guardar todos estos elementos juntos para tenerlos a mano y asegurarte de no usarlos para otra superficie que pudiera contaminarse.
Primero lleva al pájaro a otra jaula o lugar seguro donde pueda aguardar a que termines. Retira todos los accesorios y juguetes y sumérgelos en agua calientea limpiar toda la jaula con la esponja o el cepillo. No olvides ninguna parte, el piso, las paredes, perchas, platos, sobre todo los rincones de difícil acceso. Usa algún detergente o desinfectante que sea seguro para los pájaros, luego aclara con abundante agua y deja que se seque. Haz lo mismo con los platos, perchas, juguetes y demás accesorios. para que se desprenda la suciedad. Aprovecha para revisar si hay alguna pieza pequeña que esté por desprenderse a algún elemento que debas reponer. Luego quita el papel o el lienzo del fondo, descártalo y procede
Cuando todo esté seco vuelve a poner las cosas en su sitio, llena los platos o botellas de agua y los de alimento y ya está listo para que el ave retorne a su hogar.
Cuando compres accesorios fíjate que sean lavables. Los mejores materiales son el acero inoxidable o la cerámica, ya que no son porosos y no permiten la colonización de bacterias. Además se pueden lavar a mano o a máquina y soportan cualquier desinfectante. Todos los psitácidos son capaces de romper los platos de plástico, así que te conviene evitarlos.
Fuente: Dra. Isabel Iglesias
